Entre pancartas y consignas de rechazo hacia su administración y el desdén que ha mostrado hacia sectores vulnerables como las mujeres violentadas y los trabajadores afectados por la pandemia, recibió Michoacán al presidente Andrés Manuel López Obrador, en su gira de trabajo por Morelia.
Las manifestaciones iniciaron desde las primeras horas del día frente a las instalaciones de la XXI Zona Militar, donde extrabajadores del extinto Régimen del Seguro Popular, arribaron con lonas en las que demandaron continuidad laboral, luego de que fueron despedidos en diciembre pasado y en febrero el Ejecutivo federal comprometió regularizar su situación.
A nombre de los manifestantes Samantha Ayala Camacho, explicó que desde hace 6 meses piden la recontratación.
“En su pasada visita nos dijo (el presidente) que estábamos contemplados para INSABI y queremos decirle que en Michoacán no se ha cumplido con la disposición que él dio”.
“Las Michoacanas tenemos otros datos”, se leyó en una de las mantas que colocaron activistas sobre el Acueducto, cuanto todavía los rayos de sol aún no pintaban el firmamento capitalino.
Todavía oscura la mañana, trabajadores del Espectáculo acudieron también esperanzados a lograr entrevistarse con López Obrador o alguno de los funcionarios federales, ya que luego de 3 meses con eventos cancelados, enfrentan una condición crítica.
Desesperados, entregaron el documento a personal de apoyo de la Secretaría de Bienestar y más tarde externaron su preocupación por la falta de respuesta a su petición de que se les autoricen créditos a cerca de 600 familias.
“Tenemos desde marzo y a la fecha que nuestros eventos se han cancelado, tenemos deudas de renta de bodegas, pago a personal que se le adeuda, pago a proveedores, que compró equipos y no hay dinero para pagar las deudas”.
A las protestas se sumaron otro grupo de defensoras de los derechos de las mujeres denominado “Red Colectivas de Michoacán” que gritaron consignas en contra de la postura presidencial de “invisibilizar la violencia y los feminicidios” en el país.
Jóvenes ambientalistas llegaron minutos más tarde, para externar su inconformidad con la construcción del Tren Maya debido a los efectos negativos, que aseguraron generará en el medio ambiente, pero también por el gasto que esto implica.
“Nos parece inadmisible que mientras se recorta el presupuesto a muchas áreas clave, se sigan destinando cifras millonarias a este proyecto que va a beneficiar más a la iniciativa privada, a las corporaciones que al propio pueblo trabajador”
Cerca de las 10:00 de la mañana, el presidente López Obrador salió del cuartel militar a bordo de una camioneta negra, desde donde se despidió de los manifestantes, aunque recibió algunos sobres con peticiones a través de personal de apoyo.
