El presidente Andrés Manuel López Obrador, aseguró que hay coordinación estrecha con los gobiernos estatales “como debe ser” para la implementación del plan para el regreso a la normalidad del país ante la pandemia por el Coronavirus, pero consideró “importante no imponer nada, que no haya medidas coercitivas como se decidió desde el principio”.
Ante la jefa de gobierno de la Ciudad de México, así como de los gobernadores del Estado de México, Oaxaca y Quintana Roo, López Obrador aseguró que el plan será de aplicación voluntaria.
“Si hay una autoridad municipal estatal que de acuerdo a las características propias de cada región, de cada estado decide que no va a acatar este plan no habrá controversia, no vamos a pelearnos. No vamos a dividir, no vamos a apostar a la separación”
Señaló que pese a que el plan “fue consensado en lo general, también admite la discrepancia, el derecho a disentir”.
“La apuesta es a la responsabilidad de nuestro pueblo”, señaló, tras la presentación de la nueva estrategia en la “mañanera” de este miércoles, donde también se precisó que el plan se presentó un día antes a los 32 Ejecutivos estatales.
Consideró que México transita “por un momento estelar de la democracia” y por ello, en esta etapa su administración “no van a aplicarse medidas coercitivas, nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho”.
El mandatario federal, reiteró que se va a mantener información constante sobre la estrategia ante la dificultad de dimensionar su alcance en una sola oportunidad.