A partir del 18 de mayo, 269 municipios de 15 estados del país podrán retomar las actividades escolares, en el espacio público y con participación de los sectores vulnerables, luego de que el gobierno federal consideró que las medidas sanitarias nacionales para la prevención del COVID-19 podrán levantarse para que se implementen medidas regionales.
El subsecretario Promoción y Prevención de la Salud, Hugo López Gatell Ramírez, consideró que el regreso a la actividad tiene que ser organizado, cauteloso y organizado, pero señaló que gran cantidad de municipios del país se encuentra sin casos, lo que “permite levantar o suspender las medidas de alcance nacional”.
Sin embargo, precisó que “ahora deberán ser focalizadas, de acuerdo a la intensidad de la transmisión, el riesgo y las capacidades de resolución de cada entidad federativa y de cada municipio, por lo que descartó que se quiten las medidas de cuidado, ya que ahora las medidas sanitarias nacionales “se adaptarán de acuerdo a la realidad económica, la vulnerabilidad y la capacidad resolutiva “ de las autoridades locales.
El Plan de “Regreso a la Nueva Normalidad” que presentó este miércoles la administración federal se desarrollará a través de tres etapas que concluirán el 1 de junio, cuando terminará la Jornada Nacional de Sana Distancia.
La secretaria de Economía, Graciela Márquez Colín señaló que se busca dar certidumbre, seguridad y claridad a trabajadores, empresas y autoridades tanto de estados como de municipios, por lo que en la primera etapa, desde el 18 de mayo podrán reanudar actividades escolares, en el espacio público, laborales y de personas vulnerables en “269 municipios “de la esperanza”, que no tienen ningún caso de Coronavirus y no tienen vecindad con municipios que presentan contagio.
La segunda etapa, contemplada del 18 al 31 de mayo, se considera de preparación para trabajadores, empresas y familias, a través de la implementación de protocolos que garanticen la seguridad en el ambiente laboral, readecuación de espacios y procesos productivos, y filtros de ingreso, sanitización e higiene del espacio laboral.
En la tercera etapa, que arranca el primero de junio, operará un semáforo que calificará cada región para que reinicie actividades sociales, económicas y educativas. De esta manera, si una región es calificada en rojo, se mantendrán las restricciones en todos los ámbitos, salvo que en las actividades económicas esenciales se incluirán la minería, la construcción y la fabricación de automóviles.
En el naranja, se permitirán actividades esenciales y no esenciales, pero reducidas; así como movimiento reducido en el espacio público, a la vez que las personas vulnerables podrán incorporarse con máximos protocolos.
Si una región es calificada en amarillo, podrán operar todas las actividades esenciales y no esenciales, sin restricción; en el espacio abierto público abierto habrá restricciones menores y en espacios cerrados, podrán reactivar “templos, museos, cines, teatros, restaurante”, pero de manera reducida.
En caso de que el semáforo marque verde se reanudarán todas las actividades económicas y escolares, así como en todos los espacios públicos y cerrados.
